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Arquitectos: Heimat Studio
- Área: 55 m²
- Año: 2023
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Fotografías:Ángeles Molina
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Proveedores: MARAZZI, Garcopró SL, Saloni
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El encargo consistía en la rehabilitación de un apartamento ubicado en el casco histórico de Sevilla, con una superficie de 55m2. La necesidad de los clientes de generar un nuevo espacio que contuviese dos dormitorios, cocina, comedor y salón suponía un desafío mayor. La fachada exterior del edificio se sitúa frente a una plazuela con orientación sur, por lo que los espacios más utilizados durante el día se volcaron a ella. Por el contrario, los espacios orientados a la noche se sitúan en torno al patio interior.
Con el principal objetivo de conseguir espacios flexibles, amplios y diáfanos se utiliza de bisagra un espacio intermedio, que unas veces se usará de oficina, otros como dormitorio de invitados mediante una cama abatible y otras será parte unificada del espacio principal de la vivienda. De esta forma, se proyecta como un espacio indeterminado y abierto a la transformación de usos. El apartamento se estructura a través de un mueble que va rodeando la planta como contenedor de elementos para liberar el espacio. Unas veces es armario, otras muro, mesa de trabajo, cama y estantería y hasta se fusiona con la propia cocina.
La estrategia con el material buscaba minimizar la cantidad de elementos empleados, de modo que la materia contribuyese a unificar la operación espacial de un apartamento de dimensiones reducidas. Para el mueble contenedor se eligió la madera de abedul, unificando así la imagen del proyecto. Las carpinterías exteriores también son de madera natural en el interior de los espacios y lacadas en blanco en su cara exterior en el patio. Se sustituyen las ventanas de 2 hojas por una sola, para disfrutar de mejores vistas y tener conexión con el exterior y el pequeño balcón con vegetación, manteniendo la tradición andaluza.
A su vez, para el suelo se opta por la utilización de gres de color cemento de gran formato buscando dotar de una sensación homogénea, continua y práctica. Por último, se opta por pintar de blanco todo el interior restante, de manera que la vivienda pueda absorber la mayor cantidad de luz natural, lo cual sumado a la elección de una madera clara como el abedul, terminan de iluminar de forma agradable los espacios.